Talentosos inconformistas de la moda

Quienes toman una idea y arriesgan todo para hacerla funcionar suelen ser personas fascinantes. En este blog, me gustaría echar un vistazo a cinco empresas que empezaron con recursos modestos y finalmente alcanzaron un gran éxito.

BANANA REPUBLIC fue cofundada por Mel y Patricia Ziegler en 1978. Hace algunos años, entrevisté a Ziegler en San Francisco por teléfono desde Nueva York y lo encontré encantador y agradable.

Catálogo – República Bananera

“Comenzamos con la idea de tomar los excedentes militares y venderlos como ropa de safari. Casi no teníamos dinero y no sabíamos nada sobre marketing directo”, dijo. Cuando le pregunté a Ziegler quién escribía sus catálogos de “diarios de aventuras”, respondió: “Yo. Soy redactor publicitario y mi esposa es artista. Es genial crear una empresa con tu cónyuge”.

CALVIN KLEIN Después de graduarse en el Fashion Institute of Technology en 1962, Klein empezó a trabajar en el distrito de la confección como aprendiz por 75 dólares a la semana y, para ganar dinero extra, ayudaba en la tienda de comestibles de su padre. Cuatro años después, con 2.000 dólares de su propio dinero y 10.000 dólares de su amigo Barry Schwartz, fundó su empresa.

Su gran oportunidad llegó cuando un comprador de Bonwit Teller se bajó del ascensor en el piso equivocado y entró en el taller de Klein. Esto dio como resultado un pedido de 50.000 dólares. La publicidad que le siguió en Vogue lo puso en el mapa.

DIANE VON FURSTENBERG Al igual que Mel Ziegler, también entrevisté a Von Furstenberg hace unos años en su lujoso apartamento en Park Avenue. En mi investigación preparatoria, todos los artículos que encontré enfatizaban su estilo de vida jet set y su matrimonio con un príncipe. Pero lo que más me impactó cuando la conocí fue lo inteligente que era.

“Nadie hacía un vestido burgués, así que lo hice yo”, dice. Llevó sus vestidos de punto en una maleta y presentó su idea a Diana Vreeland, la editora de Vogue, quien declaró que los vestidos ceñidos eran “absolutamente fantásticos”. Esto sentó las bases para el lanzamiento oficial del icónico vestido cruzado en 1974.

KATE SPADE, editora de moda, fundó su empresa con su marido, Andy, diseñando un bolso cuadrado. “Dejé mi trabajo en 1992”, dice Spade, “me senté con un papel de calco y supe inmediatamente qué forma debía tener: un cuadrado muy simple. En ese momento, nadie hacía nada tan limpio”.

Hizo un modelo del bolso con cinta adhesiva y cartulina y luego buscó en la parte de atrás de la revista Women's Wear Daily un fabricante de patrones de bolsos. Después fue a las Páginas Amarillas en busca de una empresa que fabricara sacos de patatas. Les compró arpillera y creó bolsos con ella. "En nuestra primera feria comercial salimos con un pedido de Barneys", dice.

RALPH LAUREN creció en los años cincuenta en un barrio difícil del Bronx, donde desarrolló una afición por el look preppy de influencia anglosajona de Brooks Brothers.

En 1964 empezó a trabajar como vendedor de corbatas. “No tenía credenciales, pero de todas formas decidí diseñar algunas corbatas para mí”, dice. “Así que le pregunté a la empresa si podía hacerlo y me dijeron: “El mundo no está listo para ti, Ralph”. Lauren se fue y encontró un fabricante que producía corbatas de 3 1/2 pulgadas a las que llamó “Polo”. En 1967 las corbatas despegaron y comenzó a crear camisas y trajes para hombres. Cuatro años después fue nombrado el mejor diseñador de ropa masculina de Estados Unidos.

-Shaun Nelson-Henrick

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